¡El Café de Nariño está en auge, y eventos como la reciente Rueda de Negocios ZASCA confirman que su camino es imparable!
Lo que acaba de ocurrir en las instalaciones de la Cámara de Comercio no es un simple encuentro; es una poderosa declaración de intenciones. Al reunir a más de 30 empresas invitadas con 80 unidades productivas beneficiarias del programa ZASCA Agroindustria Nariño, se ha tendido un puente directo entre la calidad del campo y las oportunidades del mercado.
Históricamente, el desafío para el pequeño productor ha sido saltar la brecha entre la cosecha y la comercialización. Muchos cosechan un café excepcional, de alta montaña y perfiles únicos, pero carecen de los contactos, el capital o el conocimiento para llevar esa calidad hasta las mesas de negocio.
La Rueda ZASCA ataca precisamente este punto débil. Al ser un espacio diseñado para "impulsar el café" y "fortalecer los lazos", se convierte en un acelerador económico. Los productores no solo presentan sus granos, sino también sus propuestas de valor, sus historias y sus apuestas por la innovación. Esto transforma una transacción potencial en una alianza estratégica.
El éxito de este tipo de iniciativas radica en el reconocimiento de que la agroindustria es la columna vertebral de nuestro departamento. El café no es solo un producto; es la marca de Nariño, generador de empleo, motor de la economía rural y un motivo genuino de Orgullo Regional.
Programas como ZASCA, junto con la activa participación de la Cámara de Comercio, demuestran que, con la articulación correcta, podemos consolidar el sector. Cada negocio que se gesta en esa rueda es una oportunidad para que una familia nariñense crezca, invierta y le dé un futuro más sólido a su comunidad.
Si queremos que el Café de Nariño siga "conquistando espacios" a nivel nacional e internacional, la clave está en replicar y expandir estos modelos de encuentro directo. Necesitamos seguir cultivando no solo el grano, sino también la cultura del emprendimiento, la asociatividad y la visión de mercado.