La reciente entrega de un inmueble por parte de la Sociedad de Activos Especiales (SAE) a la Alcaldía de Pasto, liderada por el alcalde Nicolás Toro Muñoz, no es simplemente una transferencia de propiedad; es un acto de profunda relevancia social y un compromiso tangible en la lucha contra la violencia de género. Este espacio, ubicado en la avenida Idema, está destinado a convertirse en un centro de atención integral para las víctimas, un refugio de esperanza y dignidad.
La Urgencia de la Respuesta
La violencia de género es una dolorosa realidad que exige una respuesta urgente, especializada y de calidad por parte del Estado. No basta con la condena pública; se requiere de infraestructura y servicios que permitan a las víctimas romper el ciclo de abuso y reconstruir sus vidas. La decisión de la administración municipal de destinar este bien a esta causa vital subraya una comprensión clara de las prioridades de la comunidad.
Como lo señaló el alcalde Toro Muñoz, este inmueble será de gran utilidad y abordará un tema que requiere atención urgente. Y es que, la utilidad de este centro no se medirá en metros cuadrados, sino en las vidas que podrá transformar. Al ofrecer servicios de asesoría legal, apoyo psicológico y acompañamiento social, el municipio está brindando las herramientas esenciales para la recuperación y el empoderamiento de las personas afectadas.
La Misión de la SAE y el Bienestar Común
Es igualmente destacable el papel de la SAE en este proceso. Las palabras de su directora, Amelia Pérez, resaltan un principio fundamental: los bienes bajo administración de esta entidad deben ser revertidos a la sociedad, al servicio del Estado y de la comunidad. Este tipo de gestión, que impulsa el "cambio con dignidad", convierte activos incautados o en extinción de dominio en capital social, honrando su misión de mejorar la calidad de vida de los colombianos. Este es un ejemplo concreto de cómo la colaboración entre entidades estatales puede generar un impacto positivo directo en la población más vulnerable.
Un Compromiso que Se Vuelve Referente
La puesta en marcha de este centro no solo será una respuesta a una necesidad local, sino que tiene el potencial de convertirse en un referente para otras ciudades. La administración de Nicolás Toro Muñoz reafirma su compromiso con los más vulnerables, demostrando que la voluntad política, cuando se alinea con la acción efectiva, puede garantizar una vida libre de violencia para las mujeres y familias de Pasto.
Este inmueble es ahora un símbolo de la lucha, un lugar donde la vulnerabilidad se encontrará con el apoyo profesional y donde la dignidad será la piedra angular de la recuperación. Pasto está dando un paso firme hacia una sociedad más justa e igualitaria, donde el bienestar de sus habitantes es, sin duda, la prioridad.
