Las próximas elecciones para los Consejos Municipales y Locales de Juventud, que se llevarán a cabo este domingo 19 de octubre, no son un evento electoral más; son un testimonio rotundo del creciente interés de la juventud colombiana por la participación democrática. Con un impresionante total de 45.183 candidatos compitiendo por 11.012 curules, el país presencia una movilización juvenil sin precedentes.
Las cifras hablan por sí solas. El número de listas inscritas asciende a 9.009, lo que representa un notable incremento del 15% respecto a los comicios de 2021. De manera igualmente significativa, la cantidad de aspirantes ha aumentado en un 8%. Este crecimiento no es accidental; es un síntoma de que la juventud ha encontrado en estos Consejos un espacio tangible y efectivo para incidir en las políticas públicas que los afectan directamente.
Resulta particularmente alentador el equilibrio y la diversidad en las postulaciones. En un país que aspira a una mayor equidad de género en sus esferas de poder, la composición de los candidatos es un excelente punto de partida: 23.973 mujeres y 21.206 hombres se han inscrito, demostrando que las jóvenes colombianas están tomando la delantera en la arena política. A esto se suma, aunque en menor número, la inclusión de cuatro candidatos no binarios, reflejando un avance lento pero constante hacia la visibilidad de la diversidad de género en los espacios de representación.
La estructura de las listas también ofrece una radiografía interesante de la organización juvenil. La participación de 4.331 listas avaladas por partidos y movimientos políticos es crucial para conectar la institucionalidad con las bases juveniles. Sin embargo, la fuerza de la sociedad civil se manifiesta en las 2.358 listas de jóvenes independientes y, sobre todo, en las 2.320 listas provenientes de procesos y prácticas organizativas. Este balance sugiere que el interés no se limita a las estructuras partidistas tradicionales, sino que emana de movimientos genuinos y bases autogestionadas.
Mirando el panorama regional, la participación es intensa y variada. Departamentos como Cundinamarca (4.531), Antioquia (4.201) y Boyacá (3.693) lideran el número de candidaturas, lo que subraya la efervescencia de la organización juvenil en el centro del país. No obstante, la tabla de candidaturas por departamento demuestra una voluntad de participación que se extiende desde la Amazonía hasta San Andrés, evidenciando una cobertura nacional del entusiasmo democrático.
El llamado a la acción es claro. Este domingo, la ciudadanía joven tiene la oportunidad de consolidar este interés récord en una participación electoral masiva. Las curules que se disputan son el puente entre la juventud y las administraciones locales. Por su parte, la Registraduría ha facilitado el acceso a la información a través de la app 'aVotar', lo cual es un paso adelante en la modernización y transparencia del proceso.
Las cifras de este año envían un mensaje potente a la clase política: la juventud ha despertado y está lista para gobernar su propio futuro. El alto número de candidatos no es solo una estadística, es una promesa de renovación, un desafío a la inercia política y la confirmación de que la democracia colombiana tiene en sus jóvenes una fuente inagotable de vitalidad y esperanza. La responsabilidad de garantizar que esta energía se traduzca en gobiernos locales representativos y eficaces recae ahora en los votantes.